¿Actualmente cuál es el problema más constante en relación a la inseguridad en el municipio Sucre?
El problema más constante debe ser, los robos o hurtos. Roban muchos celulares y carteras, pero estos robos casi nunca son denunciados. Pero el problema más importante para la Alcaldía son los homicidios, secuestros y delitos vinculados con la droga. Nosotros en la Alcaldía, hemos querido atacar estos delitos mayores y luego los menores. En este caso nuestra prioridad es salvar vidas, siempre será más importante una vida que un celular.
¿Se tiene algún registro de la cantidad de robos o sucesos relacionados con la inseguridad?
Sí se tiene un registro diario, incluso hasta registros por hora. En la gestión pasada el promedio fue de dos homicidios diarios, actualmente hemos logrado descender el promedio a 1,4 diario. Casi un 30 % menos. Los robos o hurtos son más difíciles de registrar pues no los denuncian. En el 2008, en el municipio Sucre se calcula que hubo 44 homicidios por cada cien mil habitantes.
¿Cómo surgen las bandas, “mafias” o pandillas del barrio y por qué si muchas veces los policías saben quiénes son no se toman medidas contra ellos?
Las bandas, mafias o pandillas surgen de los negocios ilegales. Tráfico de drogas y contrabando. La estructura de mafia es cerrada, en ella está involucrada una gran cantidad de gente con poder económico y político. Estas estructuras cerradas funcionan con un sistema económico parecido al oligopolio, en el que se estipula un precio determinado para las drogas de forma que la mercancía cueste lo mismo en todos sectores de la ciudad. De esta forma se distribuye el precio y la venta. La única solución para este problema es la reducción del tráfico de drogas, la cual se encuentra en manos del ejecutivo nacional, ya que los policías municipales funcionan sólo como policía preventiva. Luego de esta estructura política y económicamente fuerte surgen los jefes de las bandas en los barrios, que pueden ser considerados un modelo a seguir por los habitantes del mismo.
Los habitantes del barrio se adentran en el mundo de las drogas desde temprana edad. Un negocio fácil y accesible visto como una forma de salir adelante y ganar dinero. Por el déficit de estructura familiar y un entorno favorable para su crecimiento los niños encuentran dentro del negocio de la droga un camino a seguir. El promedio de edad de los “malandros” asesinados está entre los dieciocho y veintinueve años.
El verdadero problema es que no existe justicia, y luego de ser apresados los integrantes de las bandas, el proceso judicial pertinente nunca es llevado a cabo por las instituciones estatales. Otro motivo por el que no se cumple la justicia es que las pandillas tienen unos “potes” de dinero conocidos como “seguro”. Este dinero es utilizado para sobornar o pagar en caso de que un integrante de la banda caiga en prisión.
¿Cómo es la mentalidad de los vecinos de Petare y las zonas rojas del municipio Sucre con respecto a la inseguridad?
La gente se acostumbró a vivir con ellos. Lo ven como algo más, simplemente está ahí, nada del otro mundo. Además el malandro no asesina por asesinar. Siempre y cuando las personas no se involucren en sus negocios no tomarán represalias en su contra. Muchos asesinatos surgen por la presencia de personas inocentes que coinciden con la línea de fuego en los enfrentamientos entre bandas.
¿La policía del municipio se ha esforzado por mantener el orden y la seguridad?
Actualmente la policía, en conjunto con especialistas de la universidad de Harvard está llevando a cabo nuevos operativos de patrullaje que han traído como resultado una disminución del 30 % en los índices de criminalidad. Claro que todavía falta mucho por mejorar, pero si se sigue atacando al hampa y reforzando la policía se logrará un mejor trabajo.
¿Qué medidas se han tomado en la alcaldía para combatir la inseguridad en la zona?
La Alcaldía tiene varios planes. Además de las investigaciones que se han hecho en conjunto con la universidad de Harvard, de la publicación de cifras las cuales son fundamentales para combatir la inseguridad ya que se puede saber exactamente dónde y cuándo suceden los problemas, la Alcaldía del municipio se está planteando la posibilidad de instalar GPS en los vehículos policiales para controlar los patrullajes. También la instalación de cámaras en los autobuses pues es en ellos en los que se presenta la mayor cantidad de hurtos.
¿Cuáles son los sectores más peligrosos de la zona y por qué?
Los sectores más peligrosos, en contra de lo que se dice en la calle, son aquellas que están más cerca de la ciudad. La redoma de Petare puede considerarse uno de los sitios más peligrosos ya que en ésta se encuentran los accesos a todos los barrios, y es el sitio propicio para la venta de la droga. Además de la redoma, los sectores más pobres, como por ejemplo Petare Sur. En Horizonte, está el barrio La Lucha, que a pesar de ser un barrio pequeño, es sumamente peligroso por encontrarse dentro de la ciudad. Los barrios dentro o cercanos a la ciudad tienden a ser más peligrosos porque en éstos el negocio de la droga está más presente.
¿Cómo es el sistema de vigilancia o patrullaje de estas zonas?
Existen varios tipos de patrullaje, dependiendo de las zonas. Todo lo que comprende Petare Norte es patrullado a pié, pues el acceso de los vehículos es muy limitado. Por su parte Petare Sur es patrullado en vehículo por ser una zona menos densa en cuanto a construcción.
¿Cómo adquieren las armas las distintas pandillas de los barrios?
A través de contrabando, robo a funcionarios de las fuerzas del estado. No sólo cuentan con armas de bajos calibres sino altos calibres también. Automáticas. Desde una 9 milímetros a una Beretta, incluso ametralladoras.
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